Esta mañana decidí darle color a la niña que pinté hace unos días. Curiosamente llovió una vez acabé el boceto.
Pero permitirme que os lo muestre paso a paso:
Así quedó un tiempo, un tiempo detenido, en el que los dibujos permanecen en ese estado de bocetos a la paciente espera.
Hoy el sol lucía como en una mañana de primavera y la niña que nos trajo la lluvia, acabó siguiendo a un gato que se unió a ese mundo en constante movimiento del mural.
"Hay cosas encerradas dentro de los muros que, si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo"
García Lorca.
Me gusta mucho Julián, qué fácil parece con el trabajo que tiene....te admiro.
ResponderEliminarUn abrazo